Después de la versión original compuesta e interpretada por Neil Diamond en 1966 y adaptada poco tiempo después por el propio Diamond para aquel grupo de jóvenes melenudos, imitadores de los Beatles y uno de los exportadores del sonido "chicle", como eran The Monkees (con Micky Dolenz como vocalista principal, convirtiéndose en un tema icono de aquellos años), llegaría esta otra versión en 1974 por un sobresaliente Robert Wyatt que le llevaría a entrar en las listas de ventas, alcanzando el puesto #29 en el Reino Unido. Aquí le vemos postrado en su silla de ruedas, en su reaparición pública para un programa de la televisión británica ("Tops Of The Pops", pese a las reticencias de la BBC a mostrar a un inválido delante de las cámaras) tras sufrir un desgraciado accidente doméstico al caerse desde lo alto de una de las ventanas de su casa, en un tercer piso, durante una fiesta con varios de sus amigos el 1 de julio de 1973.
Robert Wyatt es uno de los exponentes, aún en activo, del llamado sonido "Canterbury". Empezó formando parte del grupo The Wilde Flowers, hasta que en 1966 fundó junto con Mike Ratledge, Kevin Ayers y Daevid Allen la famosa banda de fusión jazz-prog-rock Soft Machine. Cuando abandona esta formación para crear en 1970 su propia banda Matching Mole, con la que solo grabaría tres álbumes de gran factura, decidió seguir en solitario grabando al poco tiempo de su grave accidente "The End Of An Ear" para el sello CBS, sin grandes repercusiones de ventas pero sí excelentes críticas.
Sin embargo, su fama empezaría a alcanzar cotas internacionales tras la publicación de su siguiente disco "Rock Bottom" (oirlo a través de Spotify) en 1974 para la compañía Virgin Records, propiedad de Richard Branson, con colaboraciones míticas como la de Fred Frith, Hugh Hopper, Ivor Cutler y el propio MIKE OLDFIELD tocando magistralmente la guitarra en el tema "Little Red Robin Hood Hit The Road", así como el batería Nick Mason de Pink Floyd encargándose de su producción. Es este álbum un denso y extraño trabajo que aglutina el aliento del jazz, la frescura del pop, la psicodelia enfermiza. Una obra de bella factura en la que se superponen sentimientos encontrados, de la melancolía al humor, y de la exaltación emocional a la exploración de los recovecos más íntimos de nuestra psique. Actualmente es considerado un disco de culto, pero en su tiempo acaparó la alabanza unánime de la crítica y obtuvo algún que otro galardón, como el Grand Prix Charles Cross de París. Rock desde el fondo, profundo, en esencia.
Sobre la canción "I'm a believer", tendría varias versiones más, incluso la del grupo Smash Mouth en 2001 consiguiendo un notable éxito que les serviría para reaparecer en la banda sonora de la película de animación de Dreamworks, "Shrek", junto con otra versión interpretada por el propio actor Eddie Murphy (Asno).
Ver más sobre este artista en Wikipedia y su web.
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