Apenas acaba de aparecer en el mercado y ya lo tengo en mi casa, con dedicatoria del propio Carlos Gª Vaso, un tío muy grande como músico y como persona. Y es un enorme placer de conocerle casi a diario a través del libro-cara, aunque más de una vez he soñado con verle cara a cara, estrechar manos y charlar con él animosamente de su música, sus producciones, además de otras cosas, aun cuando lo más cerca que pude verle fue cuando hace poco más de 25 años (cuando entonces Azul Y Negro lo constituía el tándem Carlos Vaso y Joaquín Montoya) los vi actuar en Algeciras, gracias a la promoción de una emisora de radio (los 40 principales de la SER, creo recordar). Quizás algún dia no muy lejano eso ocurra, si me lo planteo seriamente, ya sea yendo a verle actuar en algún próximo concierto o en otras circunstancias. Nunca se sabe lo que el futuro puede deparar.
"Crystalline World" es un paso adelante en la carrera de Carlos Vaso, aka Azul Y Negro, y un cambio de tendencia casi abismal entre el estilo tecno-pop, ocasionalmente electrónico-sinfónico (por aquel gran disco conceptual "Déja-Vu") de sus anteriores trabajos con el nuevo sonido que nos encontramos en esta nueva producción, más cercano a los postulados del rock progresivo. Desde la portada, sencilla visual y técnicamente, pero sugerente y misteriosa a la vez, hasta los contenidos, nos envuelve en ese mismo halo de misterio. Hay una gran evolución en el trabajo de composición, consiguiendo adentrarse en nuevos territorios musicales y dando más prominencia a su propia voz; tanto la música como las letras de las canciones incluidas en este trabajo son más complejas y hay una mayor presencia de las guitarras eléctricas en todo el disco. Este detalle marca claramente la intención de Carlos a la hora de definir su nuevo trabajo, el duodécimo en su haber en esta nueva etapa de Azul Y Negro.
Hay referencias claras al movimiento del 15-M en la canción "Spanish Revolution", muy rockera y potente gracias al empleo de las guitarras. "It is the Spanish Revolution, trying to change the world", reza el estribillo. Toda una declaración de intenciones. En lo musical, aunque no me gusta realizar comparaciones de ninguna clase, hay ciertas influencias en grupos míticos pertenecientes a este género del rock en los años 70. Algunos buscarán comparaciones, pero no tiene por qué haberlas. "My bicycle", por ejemplo, puede parecerse en cierta forma al "Celebration" (originalmente "E' festa") de Premiata Forneria Marconi, sin ni siquiera pretenderlo. Otras canciones podrán hacernos recordar a Pink Floyd, los Beatles, Gentle Giant o Deep Purple, pero esa asociación de ideas entre el conjunto de este disco con la música de aquellos grupos puede resultar contraproducente al mismo tiempo. Es mejor no plantearnos esa asociación y dejarnos arrastrar por la corriente de la música de Carlos hasta lo más profundo de su ser, simbólicamente hablando.
Me alegro enormemente porque Carlos Vaso demuestra una gran versatilidad a la hora de plantear estilos y tendencias musicales. Lo hizo en los años 70, en cuya época había elucubrado algunas obras conceptuales, cuando entonces formó parte del grupo de folk-rock Granada a las guitarras acústica y eléctrica para la grabación del estupendo álbum "Valle del Pas" (1978), antes de entrar a formar parte del grupo madrileño Greta, con una marcada tendencia hacia el "glam-rock", para más tarde adentrarse junto a Joaquín Montoya en el ámbito de la música electrónica en clave de techno-pop, a partir de las influencias marcadas por bandas alemanas como Kraftwerk y con la que empezaron a llegar los éxitos más comerciales de toda su carrera: ejemplos evidentes de ello son canciones como "Me estoy volviendo loco", "No tengo tiempo (Con los dedos de una mano)", "The Night", "Isadora", "Fantasía de Piratas" o "La Torre de Madrid", grandes himnos del tecno-pop español. Mejor os recomiendo leáis toda la historia.
Entre aquellos proyectos surgió precisamente la ópera-rock que da nombre al disco y que ve, por fin, la luz con una obra dividida en cinco partes de extraordinaria belleza compositiva y de una gran complejidad, hecha con los cánones del rock progresivo más genuino:
Tracklist:
1. Today Now (5.45)
2. My Bicycle (3.51)
3. Smoke (5.24)
4. Spanish Revolution (4.58)
5. Save Our Love (5.12)
6. Calcutta (5.12)
7. The Changing (5.10)
Crystalline World (Rock Opera):
8. Part I: Prophecies (5.10)
9. Part II: Psalms (6.32)
10. Part III: Chants and Destruction (5.14)
11. Part IV: Laments (7.21)
12. Part V: Elegy (5.05)
El disco puede adquirirse físicamente al precio de 8,00 euros a través de la web oficial de Azul Y Negro. No os arrepentiréis si os gusta no solo la música de Azul Y Negro sino también el rock progresivo. Más adelante se ofrecerá, en formato digital, en las tiendas habituales online y aparecerá igualmente en la biblioteca de la aplicación Spotify para su pausada escucha, solo para los usuarios de la misma en cualquiera de sus diferentes modalidades (Free, Open, Unlimited o Premium).
Éste es el video del primer single, "My bicycle". Una canción muy dinámica y con la que he vibrado tantas veces como la he escuchado a lo largo del dia.
"Crystalline World" es un paso adelante en la carrera de Carlos Vaso, aka Azul Y Negro, y un cambio de tendencia casi abismal entre el estilo tecno-pop, ocasionalmente electrónico-sinfónico (por aquel gran disco conceptual "Déja-Vu") de sus anteriores trabajos con el nuevo sonido que nos encontramos en esta nueva producción, más cercano a los postulados del rock progresivo. Desde la portada, sencilla visual y técnicamente, pero sugerente y misteriosa a la vez, hasta los contenidos, nos envuelve en ese mismo halo de misterio. Hay una gran evolución en el trabajo de composición, consiguiendo adentrarse en nuevos territorios musicales y dando más prominencia a su propia voz; tanto la música como las letras de las canciones incluidas en este trabajo son más complejas y hay una mayor presencia de las guitarras eléctricas en todo el disco. Este detalle marca claramente la intención de Carlos a la hora de definir su nuevo trabajo, el duodécimo en su haber en esta nueva etapa de Azul Y Negro.
Hay referencias claras al movimiento del 15-M en la canción "Spanish Revolution", muy rockera y potente gracias al empleo de las guitarras. "It is the Spanish Revolution, trying to change the world", reza el estribillo. Toda una declaración de intenciones. En lo musical, aunque no me gusta realizar comparaciones de ninguna clase, hay ciertas influencias en grupos míticos pertenecientes a este género del rock en los años 70. Algunos buscarán comparaciones, pero no tiene por qué haberlas. "My bicycle", por ejemplo, puede parecerse en cierta forma al "Celebration" (originalmente "E' festa") de Premiata Forneria Marconi, sin ni siquiera pretenderlo. Otras canciones podrán hacernos recordar a Pink Floyd, los Beatles, Gentle Giant o Deep Purple, pero esa asociación de ideas entre el conjunto de este disco con la música de aquellos grupos puede resultar contraproducente al mismo tiempo. Es mejor no plantearnos esa asociación y dejarnos arrastrar por la corriente de la música de Carlos hasta lo más profundo de su ser, simbólicamente hablando.
Me alegro enormemente porque Carlos Vaso demuestra una gran versatilidad a la hora de plantear estilos y tendencias musicales. Lo hizo en los años 70, en cuya época había elucubrado algunas obras conceptuales, cuando entonces formó parte del grupo de folk-rock Granada a las guitarras acústica y eléctrica para la grabación del estupendo álbum "Valle del Pas" (1978), antes de entrar a formar parte del grupo madrileño Greta, con una marcada tendencia hacia el "glam-rock", para más tarde adentrarse junto a Joaquín Montoya en el ámbito de la música electrónica en clave de techno-pop, a partir de las influencias marcadas por bandas alemanas como Kraftwerk y con la que empezaron a llegar los éxitos más comerciales de toda su carrera: ejemplos evidentes de ello son canciones como "Me estoy volviendo loco", "No tengo tiempo (Con los dedos de una mano)", "The Night", "Isadora", "Fantasía de Piratas" o "La Torre de Madrid", grandes himnos del tecno-pop español. Mejor os recomiendo leáis toda la historia.
Entre aquellos proyectos surgió precisamente la ópera-rock que da nombre al disco y que ve, por fin, la luz con una obra dividida en cinco partes de extraordinaria belleza compositiva y de una gran complejidad, hecha con los cánones del rock progresivo más genuino:
Tracklist:
1. Today Now (5.45)
2. My Bicycle (3.51)
3. Smoke (5.24)
4. Spanish Revolution (4.58)
5. Save Our Love (5.12)
6. Calcutta (5.12)
7. The Changing (5.10)
Crystalline World (Rock Opera):
8. Part I: Prophecies (5.10)
9. Part II: Psalms (6.32)
10. Part III: Chants and Destruction (5.14)
11. Part IV: Laments (7.21)
12. Part V: Elegy (5.05)
El disco puede adquirirse físicamente al precio de 8,00 euros a través de la web oficial de Azul Y Negro. No os arrepentiréis si os gusta no solo la música de Azul Y Negro sino también el rock progresivo. Más adelante se ofrecerá, en formato digital, en las tiendas habituales online y aparecerá igualmente en la biblioteca de la aplicación Spotify para su pausada escucha, solo para los usuarios de la misma en cualquiera de sus diferentes modalidades (Free, Open, Unlimited o Premium).
Éste es el video del primer single, "My bicycle". Una canción muy dinámica y con la que he vibrado tantas veces como la he escuchado a lo largo del dia.
Mi valoración global: 8 / 10
Muchísimas gracias por la crónica. Veo que has captado perfectamente la esencia de mi nuevo álbum CRYSTALLINE WORLD. Le doy difusión a través de mi Facebook. Ah! y podemos vernos cuando quieras, no hay ningún problema. Cuenta con ello. Un fuerte abrazo
ResponderEliminarCarlos Vaso/Azul y Negro
Muchas gracias por leerme, Carlos.
ResponderEliminarOjalá nos veamos pronto. :)
Un fuerte abrazo